Idioma español estándar y su universalidad
El español es hablado en más de 21 países y por más de 480 millones de personas. La elevada cantidad de hispanohablantes y su dispersión geográfica propicia su desarrollo y las diferencias evolutivas en la lengua, no solo el acento, sino también en la morfología, la sintaxis y el léxico.
Estas distinciones se observan entre el castellano que se utiliza en España y Latinoamérica. Se hace aún más evidente entre los distintos «españoles» que lo utilizan en América, ya que el idioma de Latinoamérica no es único, responde a una realidad dialéctica muy heterogénea, de forma que entre las distintas zonas y regiones de Latinoamérica se dan grandes diferencias en el léxico, la semántica y la sintaxis.
Solemos hablar de la existencia de dos importantes tipos de español: «español europeo» y «español de América». Esto es un fallo importante porque lo correcto sería tener en cuenta la variedad de modalidades que observamos en el «español en América». Aunque la coexistencia de estas formas del lenguaje no impide una intercomunicación fluida, si plantea dificultades y exige tomar decisiones en el momento que elaboramos y comercializamos bines y servicios dirigidos a las diferentes zonas.
En la industria del cine se ha tomado la decisión de elegir cuatro formas de español en las que normalmente se doblan los celuloides: europeo, rioplatense, mexicano y puertorriqueño. Todas ellas comparten la raíz del idioma, pero presentan distinciones en temas importantes.
Los libros y revistas traducidos, concretamente los de contenido técnico y científico, tiene un problema similar cuando las traducciones se dirigen al público hispanohablante.